MONITOR GANADERO AGOSTO 2022
En términos productivos, la cadena bovina presenta números relativamente estables de faena y producción de carne, con datos positivos como la reducción en el nivel de faena de hembras y leve suba del peso de faena. • El principal desafío pasa por sostener la rentabilidad en un escenario complejo desde lo climático y lo económico. Al debilitado poder adquisitivo de la demanda interna se suma una exportación con bajo poder de compra, derivado de precios internacionales que se han desinflado y un profundo atraso cambiario. Así, sin tracción genuina, los precios están relativamente pinchados desde abril. • La exportación ha ido incrementando la demanda de carne, demandando el 30% de la producción en mayo y junio, luego de haberse estabilizado en niveles del 24%-25% post restricciones a las exportaciones. • Hacia adelante, está presente el riesgo de una devaluación que descalza el negocio ganadero, con un costo de alimentación que sube de manera inmediata y precios de la hacienda que suben con cierto rezago. Pero también significa una oportunidad, al mejorar el poder de compra de la exportación y recuperar un motor de tracción para la cadena.