BLANQUEO Y FATCA: LAS DUDAS Y LO QUE ESPERAN EN EL SECTOR PRIVADO

Tributaristas matizan el impacto del acuerdo con Estados Unidos. Respecto del blanqueo destacan que no sería necesario repatriar fondos. La disyuntiva es si será más barato declarar dólares que pesos.

El Gobierno ya se apresta a mandar al Congreso el nuevo proyecto de exteriorización de capitales que no sólo abarca a fondos del exterior, como hacía suponer la firma del acuerdo de intercambio de información fiscal con Estados Unidos. También se podrán declarar pesos. Si hubiera un problema para el Ejecutivo, en todo caso, no sería ni de la ley ni del pacto, sino de confianza ya que ni aún bajo la posibilidad de ser descubiertos con dinero no declarado en el extranjero habría una gran disposición de los involucrados a hacer uso del beneficio, según pudo averiguar Ámbito.

En relación al blanqueo, por tratarse de un proyecto de ley sobre impuestos, la cámara iniciadora tiene que ser la de Diputados, aunque según trascendió se busca modificar una iniciativa que cuenta con la sanción del Senado, de Oscar Parrilli. Si por rapidez se trata de avanzar en la Cámara alta donde hay votos suficientes, probablemente haya cuestionamientos de validez constitucional. Si se arranca en Diputados, el problema es la pésima relación que hay entre los bloques del oficialismo y la oposición que podría bloquear el funcionamiento.

 

En relación al acuerdo FATCA, algunos analistas consideran que la profundidad de la información que recibirá la AFIP de su contraparte no será diferente de otros. “Tal como hemos venido indicando, no recibirá información de bienes, información de saldos de cuentas bancarias, montos de portafolios de inversión, entre otras”, señaló Sebastian Domínguez, socio de SDC Asesores Tributarios. Explicó que en el caso de las cuentas bancarias solo se conocerán “los intereses cobrados en el año calendario si los mismos superan los u$s10”. El ejemplo sería si un residente en Argentina tiene u$s500.000 en una cuenta de cheques y no cobró intereses en el año, esa cuenta no será reportable a la Argentina.

Al respecto, Guillermo Pérez, CEO del grupo GNP, opinó que el acuerdo firmado por Argentina “no será diferente de los aproximadamente 100 tratados de intercambio de información fiscal automática que Estados Unidos ha concretado con diversos países”. “Estados Unidos usualmente solo suministra intereses y dividendos obtenidos en instituciones financieras y solo aquellos que sean de origen estadounidense. Estados Unidos no suministra saldos de cuentas al cierre, ni movimientos bancarios. Tampoco informa sobre tenencias de inmuebles o de sociedades”, señaló. Pérez explicó por otro lado, que EE.UU. por el momento no está obligado a dar información de beneficiarios finales de cuentas. Es decir, solo entrega datos financieros de la primera línea. Pero señala que se espera que antes de que concluya el mandato de Joe Biden se modifique ese aspecto.

Algunos contadores consultados por Ámbito consideran que, luego de que se pusiera en marcha el acuerdo global de intercambio de información impositiva a través de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), “Estados Unidos se ha convertido en un gran paraíso fiscal sin precedentes”. “Uruguay abrió todos sus datos en el marco de ese acuerdo y hubo muchos que sacaron sus fondos de ahí y los mandaron allá”, dijo un asesor.

 

Blanqueo

En relación al blanqueo existen temores. El propio Mauricio Macri, que había llevado a cabo un proceso exitoso con la promesa de no tocar por tres años los bienes declarados, se ocupó de romper su palabra al incrementar las alícuotas de Bienes Personales antes de dejar el poder. “Es poco probable que si se sanciona este nuevo blanqueo se convierta en el más exitoso”, dijo Domínguez en relación a declaraciones de Massa.

El analista destacó que el proyecto plantea que los que repatríen un porcentaje a determinar pagarán una alícuota diferencial y el que no lo haga una incrementada, de lo que se concluye que “no habría obligación” de traer dinero al país.

Por otro lado, se plantea la disyuntiva de que termine resultando más barato blanquear dólares que pesos, ya que la moneda norteamericana será cotizada al valor oficial de $170, contra un valor en el mercado libre de $300. Si una persona blanquea el equivalente a u$s10.000 en el mercado libre, tendría que pagar el impuesto sobre $3 millones, mientras que, si exterioriza esa misma cifra, pero en moneda norteamericana el valor es de $1,7 millones. Eso quedará resuelto con la letra final del proyecto cuando se conozca cuál sería el porcentaje que habría que repatriar y cuál sería la alícuota especial.

Del mismo modo, Vicente Lourenzo, de la Cámara de Estudios Profesionales Económicos y Tributarios (CEPET) puso reparos. Uno de los artículos permite a los monotributistas exteriorizar hasta u$s50.000. “No creo que tenga mucho sentido”, explicó. Un ejemplo podría ser el de un propietario de 10 departamentos de los cuales solo tiene declarados 3 y alquila de forma irregular los otros 7. Si blanqueara las rentas obtenidas de ese modo inmediatamente se podría en el foco de las autoridades fiscales quienes buscarían el origen de la renta.

Lourenzo consideró respecto del acuerdo FATCA que las autoridades americanas van a revelar información detallada solo en la medida en que la AFIP lo solicite mediante un oficio, algo que ya ocurre ahora.

 

Fuente: Ámbito Financiero