La UFEIC llevó adelante el primer secuestro judicial de criptomonedas de una cuenta de un imputado de cometer ciberfraudes. Diario Judicial detalla cómo se efectuó el secuestro y donde se guardaron los activos.
El tema de las criptomonedas y la blockchain no es nuevo, hace tiempo que vemos como su uso y desarrollo es cada vez mayor y así como tuvo su mayor auge con la pandemia y luego perdió un poco su novedad ante la aparición de otros temas mal llamados “innovadores” con la difusión del metaverso o la más reciente expansión de la inteligencia artificial generativa, con el estrellato de ChatGPT, lo cierto es que el mundo cripto no esta ni lejos de parar y su avance implica cada vez mayores desafíos desde lo jurídico.
Hace poco más de un año desde este medio traíamos como novedad la aparición del primer criptoembargo judicial conocido del país en una causa civil ante la justicia tucumana, y el tema no quedó así, también vimos la aparición del primer criptoembargo penal, y de la mano de mayores avances de la cibercriminalidad que se valió de las criptomonedas para ocultar el dinero producido con los delitos surgieron también nuevas herramientas para combatir ese flagelo a través de Unidades fiscales especializadas en la materia.
Vimos como el desarrollo de las bandas cibercriminales avanzaron fuertemente pero también su investigación, dando con bandas de ciberestafadores que escondían el dinero en billeteras virtuales, ciberatacantes a través de ransomware que también se valían de estos activos para evadir la ley y también nos encontramos con un estudio solido de la problemática y como investigarla incluso aunque ello a veces suponga desafíos muy grandes.
Se logró identificar a un sujeto al cual luego se allanó con orden del Juzgado de Garantías 6 de Pilar y tras el análisis de los dispositivos encontrados en el lugar (por orden judicial), lograron dar con un bloc de notas donde el acusado inocentemente guardaba los datos de la “semilla” y las “claves” lo que permitió que se acceda a los fondos para su secuestro.
Primer cripto-secuestro judicial de Argentina:
Esta semana se conoció la novedad del primer “criptosecuestro” judicial conocido del país, llevado adelante por la UFEIC (Unidad Fiscal Especializada en la Investigación de Ciberdelitos del Departamento Judicial de San Isidro) que tras investigar una banda de delincuentes que realizaban estafas mediante la modalidad sim swapping (engaño dirigido a la empresa prestatario de telefonía mediante el cual se sustituye la tarjeta SIM de un dispositivo y se toma el control de la línea) se logró detener a un sospechoso realizándose un procedimiento de “Triage” sobre los dispositivos electrónicos que tenía en el lugar.
Desde la fiscalía le comentaron a este medio que, a través de la investigación, se logró trasear el dinero producido en el delito (alrededor de $3.000.000) que transformaban el dinero en criptomonedas a través de exchanges y luego distribuían entre distintas billeteras de exchanges o descentralizadas para entorpecer el rastreo, sin embargo se logró identificar a un sujeto cuyo domicilio se allanó con orden del Juzgado de Garantías 6 de Pilar y, tras el análisis de los dispositivos encontrados en el lugar (por orden judicial), se logró dar con un bloc de notas donde el imputado guardaba los datos de la “semilla” y las “claves” de las billeteras, lo que permitió que se acceda a los fondos para su secuestro.
El dinero secuestrado se transfirió a una billetera especial descentralizada creada por la Fiscalía de acuerdo a las “buenas prácticas” internacionales en la materia… y las “claves” de acceso a la nueva cuenta quedan plasmadas en un acta resguardada en sobre lacrado que solo es accesible al secretario de la fiscalía, resguardado como evidencia patrimonial en caja fuerte, procediéndose al borrado de las claves de todos los dispositivos en presencia de testigos.
Resguardo de las criptomonedas secuestradas:
Según pudo conocer este medio, el dinero secuestrado se transfirió a una billetera especial descentralizada creada por la Fiscalía de acuerdo a las “buenas prácticas” internacionales en la materia seguida por organismos como el FBI y el Departamento de Justicia de los Estados Unidos y siguiendo también la cripto-guía del Ministerio Público Fiscal del País, y las “claves” de acceso a la nueva cuenta quedan plasmadas en un acta resguardada en sobre lacrado que solo es accesible al secretario de la fiscalía, resguardado como evidencia patrimonial en caja fuerte, procediéndose al borrado de las claves de todos los dispositivos en presencia de testigos.
Fuentes de la Fiscalía le explicaron a este medio que, en caso de una eventual condena y decomiso, el dinero que continúa resguardado en forma de las criptomonedas secuestradas se podría pasar a la víctima en forma de criptomonedas si se reclamara a un exchange para su transformación a dinero fiduciario recién en ese momento.
Fuente: Diario Judicial