La baja de impuestos no dependerá de la voluntad del próximo presidente sino de cuánta plata necesite para pagar compromisos, ¿qué prometen Massa y Milei?
Los empresarios y sus contadores están mirando con lupa qué pueden hacer los candidatos presidenciales Javier Milei (La Libertad Avanza) y Sergio Massa (Unión por la Patria) en materia impositiva, y tienen que leer entre líneas porque evitan dar precisiones, ya que no saben cómo pagarán las obligaciones de 2024.
Cuánto tendrá que pagar con los impuestos el próximo gobierno
Lo relevante para la discusión de los impuestos de 2024 es que el peso relativo habitual de los ingresos fiscales para el sector público nacional no financiero se mantiene estable en 18% del PBI desde 2018, precisa Iaraf.
Dadas a los recientes cambios en Impuesto a las Ganancias de trabajadores y reintegro del IVA, es factible que el nivel base de ingresos sea todavía inferior a 18% del PBI.
Si el próximo presidente quiere tener equilibrio primario sin aumentar los impuestos, el peso relativo del gasto no podrá ser mayor al 18% del PBI.
En caso contrario, el aumento de impuestos deberá venir de cambios en la política tributaria o en la administración de la recaudación por parte de AFIP.
Lo cierto es que, si en 2024 se pretende ejecutar un gasto primario nacional superior a 18% del PBI, habrá que obtener ingresos adicionales a los habituales, si es que no se quiere tener déficit primario, sostiene Iaraf.
Qué cartas muestran los candidatos cobre ingresos y gastos
A la fecha es incierto el modo en que se implementarán medidas económicas una vez que asuma la presidencia el candidato que resulte ganador del balotaje, considera Javier Fuentes, gerente de Impuestos de Pgk Consultores.
Sobre todo, Milei, que viene con propuestas totalmente renovadoras del sistema tributario.
En cambio, Massa, antes de que termine el mandato de Alberto Fernández buscará equilibrar la economía, en caso de que gane la contienda, afirma, aunque agrega que tampoco ha dado visos de tener en mente medidas impositivas concretas; sólo enunció titulares de los objetivos que persigue.
Si Massa resulta vencedor en el balotaje, es de esperar que continúe tratando de mantener un equilibrio entre fuerzas muy desparejas, como ser las del sector privado versus las necesidades que necesita cubrir el Estado, advierte Fuentes.
Qué piensa Milei sobre los impuestos si gana la elección
Los dichos de Milei sobre su propuesta a nivel impositivo enlazan con su pensamiento sobre una economía de mercado, en la cual será el capital privado el que genere fuentes de trabajo y riqueza para el país, con una muy mínima intervención del Estado, explica Fuentes.
Sin embargo, le resultará difícil lograr este objetivo sin un conocimiento profundo y detallado de los números de la economía, tanto de los ingresos como de los gastos.
En más de una oportunidad, Milei ha dicho que eliminaría estructuras estatales costosas, pero sin conocer la medida de la reducción, será difícil saber los ingresos que necesitará.
Por otra parte, tampoco mencionó qué impuestos dejará vigente ni cuales eliminará, advierte Fuentes.
Cuanta más reducción se logre, mayor será la confianza que se genere en las acciones de gobierno. La contracara de esto es que el Estado no tendrá fondos suficientes para financiar sus gastos, entregar subsidios y planes y tendrá un fuerte frente de tormenta político, considera.
Para el tributarista Miguel La Vista, Milei plantea la eliminación lisa y llana de numerosos impuestos que generan efectos distorsivos sin que generen montos significativos en la recaudación tributaria.
Sin embargo, Milei no habla demasiado en detalle de las reformas impositivas que se pretenderían implementar en caso de acceder al gobierno. En esencia se ataca el problema desde la otra cara de la moneda, al proponer una brutal reducción del gasto público a fin de devolver recursos al sector privado.
Qué muestra Massa en relación con los impuestos en su mandato
Por su parte, Massa al estar en el gabinete del actual gobierno, tiene acceso a la información que a Milei le falta y está tratando de equilibrar los números de la economía sin causar efectos negativos en la gente y en las empresas, para no afectar su elección, explica Fuentes.
Hasta ahora, no se escuchó a Massa hablar de una reducción de gastos del Estado, lo que le jugará en contra para equilibrar las cuentas fiscales y tampoco es esperable una reducción significativa en los impuestos.
Massa ya adelantó que dará una discusión sobre el «gasto tributario». Esto quiere decir que quitará exenciones y alícuotas especiales para algunos productos, entre los que está la harina para el pan, por ejemplo.
El candidato de UP está dispuesto a aplicar altas tasas sobre los patrimonios, sin importar los efectos colaterales negativos que genera tanto para el Estado como para el sector público, enfatiza La Vista.
También fue pionero en la implementación del sistema de retenciones, en el que sin dudar interviene sobre cualquier actividad económica que de manera temporal o permanente obtenga rentas que a juicio del Gobierno excedan lo que en teoría deberían ganar, remarca.
Y, cuando todos los impuestos resultaron insuficientes, no duda en recurrir a la impresión de moneda espuria generando altísimos niveles de inflación, que en la práctica significan una constante transferencia de recursos del sector privado al sector público, concluye.
En síntesis, para Fuentes, es comprensible que los candidatos no muestren todas sus cartas hablando de ingresos (impuestos a cobrar), porque ambos saben que una reducción abrupta de la presión tributaria traerá problemas, ya que no tendrán los suficientes fondos para afrontar los niveles de pobreza ni las obligaciones del estado con el exterior (FMI, importaciones, etc.) y a nivel interno.
Fuente: Iprofesional.com